lunes, 14 de diciembre de 2009

El amor y el deseo van de la mano

Cuando amamos, hay muchas reacciones que se desatan no solo en nuestro cuerpo sino en nuestra mente y en nuestros sentidos.

parejaA veces nos cohibimos, sea por miedo, por paradigmas, por pena, por razones de cualquier tipo. Las dudas y las preguntas se nos vienen a la mente constantemente. Y surge en cierta forma la necesidad de complementar todo con el momento perfecto para darse un beso y darse el permiso de sentir que el deseo fluya no solo a nivel físico sino a nivel espiritual.

El deseo físicamente desencadena muchas reacciones químicas, pero también enérgicas. La endorfina, considerada la hormona del placer, se libera en grandes cantidades cuando el deseo crece, llegando a su máximo nivel cuando la relación sexual tiene efecto con deseo y consentimiento. De allí que el deseo vaya acompañado de una cierta alegría y de un placer creciente.

manos 2 En su libro "Ser una mujer Judía",la Doctora Lisa Aiken indica: "Para una persona sensitiva, el deslizar de una mano en la piel,la sensación del roce de una rodilla contra la pierna, el roce  accidental del cabello de una mujer en el cuerpo de un hombre puede y debe ser excitante".

Nada más cierto que esto. Una pareja sana física y mentalmente y madura sexualmente, puede aprovechar hasta el más mínimo gesto para tener instantes de intimidad que no necesariamente conllevan a una relación sexual. Esta intimidad tiene mucha importancia porque consolida un nuevo nivel de contacto que bien vale la pena experimentar y disfrutar sin presión alguna.

baile tubo 2 Una de los males que adolecemos en nuestra sociedad, es la falta de sensibilidad y percepción de esos momentos que son sutiles pero necesarios. Estamos tan bombardeados de sexualidad (propagandas tanto directas como subliminales, películas, información y más) que perdemos esa capacidad de darnos cuenta de las insinuaciones, provocaciones e incluso necesidades de nuestra pareja y de nosotros mismos. Y cabe decir, que si no ponemos en práctica esos leves juegos que a la final son el preámbulo de una relación, corremos el riesgo de perdernos la magia que ellos implican.

beso en el cuello 2 La intimidad no es solo sexo; es también el beso, el gesto,la palabra, el juego,la picardía en una frase, un simple mensaje, una caricia, cualquier cosa que incentive el deseo real y mutuo de la pareja. Esos detalles, mantienen viva una relación.

Siempre he dicho que las cosas no se viven de hoy y hasta hoy... Se viven desde hoy y a futuro. Por ende, cuando hagamos, digamos, pensemos, hagámoslo a sabiendas de que estamos sembrando una semilla que va a germinar a futuro.

¿Cómo será nuestra vida sexual de aquí a unos años si no aprendemos a jugar con nuestra pareja? Porque el aburrimiento siempre asecha,incluso en cuestiones de sexo. Lo novedoso hace que esa chispa se mantenga encendida.

pareja8 Una muy buena opción, es asumir juegos de roles, no importa si son atrevidos o no, solo importa si nos son agradables o no. Es claro que hay que tener muy en cuenta el nivel de aceptación que hacia ello tenga la pareja, porque no debemos hacer algo que incomode al otro o a nosotros mismos. De allí, que hasta en lo sexual, se requiera una buena comunicación.

Una pareja efectiva, puede lograr la comunicación real y total incluso en su intimidad. Y eso, es en parte garantía de una relación mucho más satisfactoria, plena y estable.

Fuentes:

http://www.tudiscovery.com/homeandhealth/relaciones/sexo/conspiraciones-contra-el-placer/

http://www.tudiscovery.com/diario_anatomia/sexo_dentro/index.shtml

"Ser una mujer Judía", Lisa Aiken. Edit... S.Amselem. Jerusalem.