Vivir el Rosh Hashana

Es año nuevo Judío. Y como en cualquier Fe, religión o creencia, se nos hace un período de reflexión. Sabemos que realmente, todos nuestros días deben ser de reflexión y mejora, sin embargo, quizá por costumbre, estos días son aún más intensas estas cosas.

Asumamos la necesidad de autoanalizar los actos de nuestra vida

Rosh Hashana es llamado en la Biblia Iom Trua; y centra dos ideas principales: Es el primer día de un nuevo año, y es el día del juicio, día de introspección. De esta manera, se realiza al comenzar un año nuevo el balance del año anterior y plantean las intenciones apropiadas para el año que nace.

En esta época del año, vemos como símbolo la balanza, ya que en este mes se juzgan todos los seres humanos, y la balanza sirve para pesar las buenas y malas acciones.

Cambios internos y cambios externos

Siempre decimos que en el mundo hay mucho por cambiar. Siempre culpamos a otros de la falta de cambios. Pero bien dijo Einstein: Si quieres que algo cambie, debes cambiar tú primero. Dejemos entonces de hacer de otros la causa, porque la causa somos nosotros mismos. Y dejemos de hacer de otros la culpa, porque la culpa, o mejor dicho, la responsabilidad, es de nosotros.

Seamos creyentes o no, no importa a qué religión pertenezcamos, ¡Por favor! Hagamos el esfuerzo, de ayudar a los demás, hagamos el bien sin mirar a quien, hagamos de nuestro mundo un mundo más solidario y mejor. Hagamos cambios.

Debemos aprender a reflexionar sobre todo aquello cuanto decimos, hacemos, sentimos y ocasionamos y sobre todo, con el corazón abierto, aprender a arrepentirnos de nuestros errores; porque no hay nada más espléndido que la acción de la reflexión efectiva y que orienta el cambio interno… Desde aprender a decir “Buenos días”…  hasta aprender a decir “Gracias”….

Caridad y Justicia

Ser caritativo no siempre es sencillo. Es una condición muy personal. No se trata de dar lo que sobra o lo que no hace falta. Se trata de dar con la misma intensidad con la cual esperamos recibir. Se trata de retribuir lo que también hemos recibido. Se trata de un acto de agradecimiento por la buena atención y gracia de la cual hemos gozado.

No se trata de dar limosnas ni restos. Se trata de dar de si lo mejor, incluso si ello conlleva a aceptar riesgos, si conlleva a aceptar que por encima de nosotros, nuestras limitaciones y nuestras costumbres, hay algo más importante….

Hagamos la justa donación (Tzedaká), no por costumbre sino por convicción  y seamos siempre canal de Justicia (Tzedek)...  No en vano tienen la misma raíz en el idioma Hebreo. Donemos en justicia, porque eso implica hacerlo de corazón, a quien más lo requiere y sobre todo, sin egoísmo y sin protagonismo.

Ser agradecidos

Nos quejamos mucho, pero vamos, veamos cuántas personas sufren con más razones que nosotros... En vez de quejarnos, aprendamos a dar gracias por todo lo bueno que nos ha llegado y demos gracias a Di-s por el simple hecho de no tener razones mayores o peores de queja, por el simple hecho de existir y por el gran poder que nos otorga para cambiar e impulsar cambios...

Seamos lo que debemos ser

El desierto más árido, puede albergar la flor más singular y hermosa. Seamos nosotros la flor, no el desierto. Que de nosotros emane el aroma del bien, la belleza, el color que refleja la alegría, la calma y la paz. No seamos la aridez ni la piedra, no seamos tierra muerta donde no germine semilla alguna. Por el contrario, seamos la tierra fértil en la cual crezca la bueno.

Mi deseo es que todos seamos inscriptos en el Libro del Señor y tengan una buena firma (Jatimá Tová)

Shaná Tová Umetucá (Feliz y Dulce Nuevo Año) para todos.

Baruj atá beboeja ubaruj atá betseteja
(Bendito serás cuando entres y bendito serás cuando salgas).