viernes, 24 de octubre de 2008

El mágico poder de la risa


No existe nada que sane tanto y de forma tan efectiva y veloz, como la risa.
 
Hoy tuve el inmenso placer de estar en una reunión que duró algunas horas... Y no recuerdo haberme reído tanto en mucho tiempo. Tanto como para asegurar que horas después, me sigue doliendo el abdomen, supongo que por doblarme - literalmente hablando - de la risa.
 
Las cosas más absurdas y sencillas, fueron suficientes para que todos los que estábamos presentes, nos riésemos a carcajadas... y qué carcajadas!!!
 
Primero tuvimos una breve pero excelente risoterapia, dirigida por el risoterapeuta o risólogo - como él mismo se autodenomina - Sr. Menahem Belilty. Para él, la risa es el mejor remedio, la mejor terapia.
La risoterapia enseña a reír sin depender de un chiste, mejorando a través de la alegría, la salud y la calidad de vida.
 
Reírse ejercita los músculos no solo de la cara sino de todo el cuerpo. El diafragma trabaja, trabajan los músculos faciales, los brazos, el corazón, todo. Porque al reírnos, nos movemos, nuestra química corporal se activa en positivo, la mente se despeja, se liberan sustancias excitantes en el cuerpo y de paso, el estrés termina cediendo.
 
Belilty hizo reír a una cantidad de gente impresionante, sin contar chistes. Simplemente nos puso en movimiento: Arriba las manos, vamos a caminar hacia la pared y van a reír, hagan JAJAJAJAJA mientras caminan... Ahora JEJEJEJE... caminando, con las manos al frente...
 
No me pregunten, solo puedo decirles que de repente, nos dio risa eso. Y es que la risa es contagiosa!!!
 
Cuando llegamos a JUJUJUJU, ya nadie podía aguantar las ganas de reír, de estar en movimiento, a pesar del calor, del poco espacio. La risa simplemente se apoderó del todo.
 
Al momento de despedirse, le acompañó un aplauso tan caluroso que yo me atrevo a afirmar que jamás se le podrá olvidar tanto calor humano!!!
 
Más tarde, llegó el rey del humor inteligente, el Sr. Laureano Márquez!!! Este hombre trabaja el humor intelectual, desde el criollismo absoluto de los venezolanos: A mal tiempo, buena cara y buen humor!!! Comentarios tan agudos, certeros y alocados, solo pueden venir de un ser ingenioso, inteligente y con cierto sarcasmo tan característico. Describiendo la mordaz idiosincrasia venezolana en tan solo una media hora - quizá la hora completa - en la cual reímos sin parar. Y cuando digo sin parar, es que nos faltaba el aire de tanto reírnos.
 
No me había nunca detenido a pensar que la tecnología nos domina el instinto... hasta hoy. Y que el divorcio era tremendo negocio enriquecedor (para la esposa que despluma al ex esposo!!!) y si haces una obra de teatro te terminas de enriquecer con la venta de las entradas... Comentarios iban y venían sobre la vida cotidiana que si uno analiza con seriedad puede ser cruel y dolorosa, pero en el mundo del humor, dejan de tener el aire amargo y termina haciéndose evidente que hay que reír de uno mismo inclusive. De repente noté que me dolía el estómago de tanto estar doblada de la risa!!!! y me estaba riendo porque me di cuenta que hasta las cosas más duras pueden tener su humor...
 
Al rato, Laureano invitó al humorista más esperado: Emilio Lovera. Solo verle la cara y ya uno se ríe sin parar- Aunque no haya hablado, ya la gente está riendo porque SABE que Emilio va a decir algo que va a dar risa. Como ven, la risa no necesita siquiera palabras. Basta con tener la certeza de poder reírse. He allí la magia de la risa!!!
 
Cuando Emilio Lovera tomó posesión del escenario y comenzó a mostrar su ya conocido talento, la gente comenzó a reír sin parar. Humor criollo, elocuente, que a la vez peca de indiscreto. Humor cotidiano. Todo el show se fue en dos cuentos medio largos y muy absurdos que fueron el deleite de los que estábamos allí reunidos. Y no pudimos dejar de reír...
 
Toques de locura, eso es lo que nos hace falta para sanar las emociones dolidas. Poder ver luz en la obscuridad. Poder reír de nosotros mismos. Poder tomar control - o descontrol - de nuestras vidas aunque sea por instante y DECIDIR reírnos en vez de llorar y amargarnos.
 
De este día me quedó la convicción absoluta de que cada vez que pueda, cada vez que se presenten, yo voy a estar en ese público!!!
 
GRACIAS SEÑORES, MUCHAS GRACIAS, POR HABERNOS HECHO REÍR COMO NIÑOS!!!!