Esta mascarilla le devuelve a tu rostro el brillo, la tersura y la suavidad que necesitas luego de un día ajetreado.
Ingredientes:
Almendras al natural (aproximadamente 5 unidades que veas frescas)
2 cucharadas de agua mineral
Preparación: Moler las almendras (puedes hacerlo en el pica-todo, con un molino eléctrico de café o en la licuadora). Cuando obtengas el molido fino (como polvo), colocar en un tazón pequeño de vidrio o barro. Agregar el agua y mezclar muy bien con cuchara de madera, vidrio o plástico hasta obtener una crema (ésta quedará con granillo pero bastante homogénea)
Cómo aplicarla:
Lava tu rostro y cuello con agua y jabón facial. Seca suavemente y utiliza tu desmaquillante hasta que tu piel quede limpia. Enjuaga con abundante agua y vuelve a secar con un paño suave.
Esparce la crema de almendras por el rostro incluyendo contorno de ojos y labios y luego por el cuello. Deja actuar media hora (puedes mientras, ver TV, escuchar música, leer e incluso dormitar)
Enjuaga con abundante agua hasta retirar toda la mezcla. Seca con paño suave. Aplica tu crema hidratante.
Puedes utilizarla las veces que desees siempre que no seas alérgica a las almendras.