lunes, 29 de junio de 2009

Sanando Emociones (I Parte)

lazo_luto Existen a lo largo de nuestras vidas, diversos eventos que pueden ser muy dolorosos. Quizá uno de los más comunes hoy día, es el divorcio. Quienes hemos atravesado uno, sabemos que por muy sencillo o complicado que pueda parecerle a otros, solo en nuestro interior sabemos lo que ha sido realmente y la magnitud de lo sucedido. Y en general, esto sucede con cualquier evento doloroso, sea la pérdida familiar, económica, laboral u otras.

Cuando se está saliendo de un evento que nos ha lastimado, se deben vivir plenamente las etapas de la sanación. No vivirlas, implicará a la larga seguir cargando con esos pesos existenciales que no solo bloquean nuestras energías sino que nos aíslan de la gente. De allí, la importancia de darse el tiempo necesario y de decidir realmente cambiar nuestra realidad actual. Estas etapas, si bien pueden existir una a una secuencialmente, pueden también experimentarse en forma solapada. Lo importante es darse el auto permiso para vivirlas, sanarlas y liberarse.

Podríamos detallar diciendo que estas etapas, abarcan el luto y la superación y pueden ser:

  • hombre1Negación: La no aceptación, con actitudes, apatía, expresiones tales como  “Esto ni puede estarme pasando a mi”
  • Culpa: Es una etapa en la cual se experimenta soledad, duda, miedo y depresión. Muchas veces nos auto castigamos con expresiones y sensaciones tales como  “Si yo hubiese hecho más…”. Muchas veces implica creer que hemos fracasado en la vida.
  • Rabia: Es el estado natural cuando se inicia la aceptación de que  realmente algo ha sucedido. Y muchas veces incluye culpar a otros, denegar de Dios, sentir ira, alta apatía e incluso, episodios reactivos en los cuales peleamos, agredimos, insultamos, mujer maltratada2gritamos, revivimos mentalmente situaciones dolorosas, discutimos, ofendemos, victimizamos y magnificamos los hechos cotidianos sintiendo que no tenemos dominio sobre ellos. Asumimos que los designios del destino están en nuestra contra, que nuestro esfuerzo es muy alto y la satisfacción muy baja o nula. Por lo general, implica la culpabilización de otros porque nos sentimos impotentes para resolver lo sucedido. Expresiones tales como  “La culpa es de esta persona que me ha hecho daño”. "Dios me ha hecho esto", etc... En esta etapa es común luego volver a la etapa de culpas en las cuales nos sentimos mal y queremos borrar todo pero sin asumir la responsabilidad de nuestras reacciones.
  • Aceptación: Entender y aceptar que este evento ha sucedido, que realmente está en el camino. Implica la aceptación gradual de los hechos, tomando conciencia de ellos. Poco a poco volvemos al estado de calma, que si bien puede estar alterado, tiende por naturaleza a establecerse.
  • Evaluación y análisis: Analizar lo sucedido, sus verdaderas causas, sus verdaderas consecuencias, opciones y soluciones, sin culpas, rabias, imaginación negativa u otras reacciones emocionales de tipo negativo.
  • micoraznseguirdv0 Perdón: Liberación de sentimientos encontrados, eliminar la falsa necesidad de revivir los hechos una y otra vez incluso en diversos escenarios, reales o no. Implica exculpar y se basa en eliminar los rechazos a la realidad, las culpas propias y ajenas, entender que en la vida la culpa no es una herramienta útil. Es la etapa en la cual se deja de victimizar y se comienza realmente a superar. Es notoria pues dejamos a un lado las expresiones llenas de rabia, la forma reactiva constante, es decir, dejamos de estar a la defensiva en forma desmedida. No implica volver al ente que desencadena el evento, sino liberar la rabia y dejarla ir. Tomar la decisión de cambiar la página.
  • Aprendizaje: Es la etapa del cambio, en la que aprendemos a enfrentar la vida con otra actitud, en la que tomamos las herramientas adquiridas en este largo proceso y las interiorizamos, sabiendo que con ellas podremos minimizar el riesgo de volver a vivir este tipo de eventos pero sin hacernos esclavos de la situación. Implica tomar conciencia, establecer nuevos paradigmas, autoevaluarse, conciliar la experiencia y darle propósito positivo a nuestras acciones consecuentes.
  • Superación absoluta: Saber que la experiencia vivida nos ha dejado un aprendizaje, saber que por ello hemos madurado y que hemos mujer3 superado una gran prueba, sentirnos triunfadores cuando podemos reírnos sin importar cuán grave ha sido el evento vivido y saber que ahora, somos mejores personas pues hemos superado un dolor y un miedo. Implica tomar lo positivo de lo aprendido y desechar lo innecesario, pero no se trata necesariamente de olvidar sino de saber vivir con lo sucedido sin permitir que ello empañe o se adueñe de nuestra vida, de nuestros sentimientos y de nuestros actos. En esta etapa convertimos eso que habíamos creído un fracaso, es una gran lección de vida.
  • grupo apoyo Utilización: Enseñar y/o compartir lo aprendido;  específicamente compartimos la lección: No el dolor sino el crecimiento, con quienes queramos y podamos. En esta etapa nos fortalecemos aún más porque nuestra capacidad para dar está abierta y por ende, podemos también recibir sabiendo escoger lo que deseamos aceptar. Algo muy valioso en este nivel, es que valoramos intensamente nuestra capacidad y valor para haber vivido el dolor y haberlo superado; para haber enfrentado los miedos propios y ajenos, para haber podido emprender un nuevo camino y sobre todo, para lograr de nuevo sonreír !!!